La película rescata la figura del legendario “Chorrojumo” y ha contado con el apoyo de “Film in Granada”
Para culminar los cuatro años del Grado Oficial en Cinematografía de la ESCAC (Escuela Superior de Cine y Audiovisual de Cataluña), la joven cineasta granadina Lucía Alonso Santos acaba de enfrentarse al reto de ponerse detrás de una cámara, dirigir un equipo y contar su primera historia mediante imágenes y sonidos. Un auténtico desafío que ha podido asumir en su propia tierra y a través de un personaje que le resultaba muy familiar, Mariano Fernández Santiago “Chorrojumo”, el popular granadino que nació en 1824 y que, según cuenta la leyenda, murió fulminado por un rayo en los bosques de la Alhambra.
Ahora, 115 años después de su muerte, “Chorrojumo” ha vuelto a pasearse con su traje goyesco, sus largas patillas y su callao por las calles y plazas de Granada, bajo la mirada atónita de los turistas y los propios granadinos. La Plaza Isabel la Católica, la calle Reyes Católicos, la Fuente de las Batallas o el Mirador de San Nicolás han sido algunas de las localizaciones de este mediometraje, producido por ESCAC Films -la productora de la Escuela de Cine de Cataluña- como uno de los Trabajos Fin de Grado de la promoción 2017/2021 y que tras meses de preproducción acaba de finalizar su rodaje en Granada.
El milagro de la resurrección de “Chorrojumo” ha sido mérito, en primer lugar, de Lucía Alonso Santos (Granada, 1998), autora del guion original y la dirección, pero también de sus compañeros de la ESCAC, que han trabajado en equipo asumiendo todas las funciones de un rodaje profesional, de la financiación de la propia Escuela, y por último, del apoyo de las instituciones y empresas locales, principalmente la oficina de cine “Film in Granada” de la Diputación, el Ayuntamiento de Granada, Covirán y Cervezas Alhambra.
La vicepresidenta primera y diputada de Cultura, Fátima Gómez, ha señalado que “el objetivo principal de Film in Granada es facilitar todo tipo de rodajes y grabaciones en nuestra provincia, no solo de largometrajes y grandes series, sino también de proyectos más pequeños, como este de la ESCAC que ha supuesto una primera y gran experiencia para un grupo de jóvenes cineastas, que seguro que volverán a Granada para rodar sus futuros proyectos profesionales”.
El productor de la película, Guillem Mula (Barcelona, 1999), ha destacado que “el rodaje ha sido un altibajo constante de emociones muy fuertes y es el más complejo al que nos hemos enfrentado hasta ahora, porque hemos tenido que gestionar una cantidad de material y personal a la que no estábamos acostumbrados. Sin embargo, todo el mundo en Granada se ha volcado con nosotros, desde las propias instituciones, la Diputación y el Ayuntamiento, nuestros patrocinadores Covirán y Cervezas Alhambra, hasta pequeños negocios locales y muchos granadinos a título individual y mediante el crowdfunding”.
Nostalgia de la antigua Granada
“Los moradores que habitan esta tierra cayeron en un eterno letargo y ya no recuerdan quiénes son, ni qué lugar es este. Ahora viven en un tiempo sin historia, en un tiempo sin tiempo. ¿Qué queda de nosotros? ¿Quién nos recordará cuando ya no quede nada nuestro?” dice la voz en off del cantaor Curro Albayzín en el tráiler del proyecto y es el planteamiento de la cineasta granadina Lucía Alonso Santos para su primera película.
La directora ha afirmado que “después de cuatro años estudiando y viviendo en Barcelona, he logrado traerme la ESCAC hasta Granada, porque esta película intenta explorar la relación entre la identidad, el espacio y la comunidad que lo habita, y he querido hacerla en mi propia ciudad, comparando el pasado y el presente, la antigua Granada con la Granada actual”.
‘Quien vio los templos caer” cuenta la historia de “Chorrojumo”, un personaje legendario que deambula en silencio desde hace 183 años por las calles de Granada y se lamenta por la caída de la ciudad. El limbo infinito que habita el protagonista, interpretado por el actor no profesional José Fernández “Pepín”, es interrumpido con la llegada de un joven marroquí (Anad Derbai) que trae entre sus manos una antigua llave. Juntos iniciarán un viaje por las ruinas, espacios desaparecidos o en transición, de la actual Granada, en busca de la casa de los antepasados del joven, los últimos moriscos expulsados, de los que aún conserva algunos recuerdos.
La película se ha rodado íntegramente durante once días en la ciudad de Granada, con el soporte de un equipo técnico de 15 personas y una cámara Arriflex de 16 milímetros. Es uno de los diez proyectos fin de grado seleccionados por ESCAC para 2021. Entra ahora en la fase de postproducción y tiene previsto su estreno en Granada y Barcelona en la primavera de 2022.